viernes, 15 de agosto de 2008

Confesiones de un amor retro (ochentoso)

Y si, el pibe es medio freak. Dacha una declaración de amor al pop de los ochenta (si existe tal cosa).

We can Dance, everydboy is out of control!
We can Dance, Everybody look at your dance!
Safety Dance, Men Without Hats

OK, lo admito. Tengo una fucking obsesión con los años 80. Específicamente con la música que se escuchaba en aquellos años. Se que parece que contradigo lo que dije con respecto a los sonidos y las décadas pero no creo que haya un sonido de los 80. Si en cambio me gusta mucha música de esa época. No se por qué. De hecho la mayoría de las bandas que me gustan no son de aquellos años (es muy difícil que me guste una banda nacida en los 80 pero si muchas canciones de distintas bandas) sino que sacan sus últimos (y no grandes discos) en esa época. Me encanta Talking Heads pero los discos que vienen después de Fear Of Music no los muestran en gran forma. Bueno quizás exagere un poco. Muy probablemente para cuando termine de escribir la nota me arrepienta de lo dicho sobre los cuatro neoyorquinos.
Hay gustos que uno no puede explicar. Intenté hacerlo con la atracción que me producía el reality de los modelos. Esa cosa juguetona y superficial que tenía era lo que me tenía en vilo viéndolo. Y por sobre todo que era honesto. No intentaba otra cosa más que entretener. En una de esas, eso es lo que me atrae de muchas canciones de los años 80. Osea Wang Chung no era una buena banda ni a palos pero cada vez que dan un video clip en Vh1 uno se queda viéndolo. No sonaban mal pero las canciones eran realmente del montón. Pero al igual que el reality de modelos su única intención era que las chicas y chicos de los 80 se divirtieran y bailaran sin que les importara nada. Eso es lo que hace que estas canciones marquen la diferencia. El baile. Uno en los 70 no podía bailar un tema de Yes. Con un tema de The Ramones hacía pogo, aunque quizás eso también sea un baile. Con la llegada de la new wave, y luego con la profundización de estas bandas, se recuperó el baile. Cosa que estaba medio mal vista. ¿Quién no bardeaba a la música disco en los 70’s? Tarea más que noble la de estos tipos. Pero hay que decirlo, no estaban solos. Ahí estaban Hall & Oates, Men Without Hats, The Vapors, The Waitresses, The call y M (entre otros).






- ¿Quién?
- ¿Cómo no conoces a M? Era ese que cantaba la canción donde repetían como quince veces “pop music”.
- No. No lo tengo. A mi no me gusta el pop.
- Entonces esta nota no es para vos.



Uh pero yo venía hablando de Wang Chung y quería hablar de su tema Dance hall days. Que digo tema. TEMÓN. Uno no puede más que sacarse el sombrero ante un grupo que decide recuperar los bailes de salón y reinterpretarlos en medio de un contexto ochentoso. La pura celebración del baile. De la fiesta. Si uno ve el video clip ve que el momento al cual se remonta el video son los años 30. Uno siente que en cualquier momento aparecen Cary Grant y Irene Dunne y se pone a danzar como en La pícara puritana. Es al mismo tiempo una celebración de la moda. El pelo platinado del cantante y la confesión letrística: “We were cool on craze”, eso solo se puede decir en una canción pop. Es una maravilla de canción por donde se la mire. Es prácticamente perfecta. Es una melodía tan pegadiza y al mismo tiempo no satura. No aburre. Es un tema que uno podría volver a escuchar mil veces. De eso que uno aprieta repeat en el equipo de música. No es para nada estridente. Es una canción que al mismo tiempo que invita al baile, relaja al oído con una bella melodía.
Y así como se puede bailar al ritmo de este rubio platino se podía mover el cuerpo haciendo los pacitos de Safety Dance de Men Without Hats. Ese tema que parecía una canción de Jethro Tull en variante new wave. O si no Man Eater (¿No empieza parecido a Part time lover de Stevie Wonder?) uno de los tantos falsos lentos de la época como Everyday I write the book y China Girl. Y por qué no alocarse con The Vapors y bailar desenfrenadamente mientras se grita: “I think I’m turning Japanese”. Si era una época feliz. Puro baile. Esto fue lo que entendieron Virus, Los abuelos, Soda y también Sumo y Los redondos. Hay que bailar. Mal o bien pero hay que bailar.


¡¡¡¡Pero al final te gusta todo a vos!!!! Y la verdad que no. Y esto que quede bien claro: ABORREZCO EL METAL OCHENTOSO (léase: Twisted Sister, Deff Leppard, Poison, etc.)!!!!!!!!!!!!!. Debo una explicación.

Steve Zissou





El muchacho platinado y su grupete entonando su canción que incita al baile alocado.

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gracias por pasarrr

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